El gobierno de Lula da Silva ordenó suspender la venta de 24 aviones Supertucanos a Ecuador.
Los Supertucanos son aviones militares de la llamada versión Colombia que están equipados con bombas y misiles teleguiados por láser y GPS de origen israelí, además de modernísimos instrumentos electrónicos.
La fabricante Embraer, que realizó esta operación por de 261 millones de dólares, debía concretar una primera entrega de 4 aeronaves en mayo de 2009. Pero ayer, el presidente Correa volvió a desmentir a Brasil. Su ministro de Defensa, Javier Ponce, sostuvo que esa operación nunca incluyó ningún crédito de Brasil ni de ninguna otra parte. Es el Estado ecuatoriano el que la paga en efectivo. Subrayó que ya se habían pagado en forma adelantada a Embraer (una empresa mixta, pero con gestión privada) 69 millones de dólares. De modo que la adquisición de las aeronaves no debería peligrar.
Las instrucciones del presidente brasileño son un paso más en la disputa diplomática por la decisión ecuatoriana de no pagar una deuda de 243 millones de dólares con el brasileño Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
Según el presidente Rafael Correa, ese monto inicial derivó ahora en una cifra bien superior de 529 millones de dólares. Y fue utilizado por el grupo brasileño Odebrecht para construir una represa, la de San Francisco, que después de un año de funcionamiento reveló serios daños estructurales. Debido a que Correa decidió llevar el caso a una corte internacional que arbitra sobre cuestiones comerciales, Lula llamó a consulta a su embajador por tiempo indefinido. Por eso, el gobierno brasileño no financiaría la compra de los 24 Supertucanos.
Fuente: Por: Eleonora Gosman - Diario Clarín
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