lunes, 19 de junio de 2017

Utilizarán terrenos de la estación Federico Lacroze para extender la avenida Triunvirato

(Infobae) - El sector cedido no está actualmente destinado al uso operativo por lo que no se afectará el funcionamiento del servicio ferroviario
El Gobierno dispuso la clausura de forma definitiva y el levantamiento de las vías ferroviarias de un sector de la estación Federico Lacroze, en el barrio porteño de Chacarita. Así se desprende de la Resolución 362-E/2017 del Ministerio de Transporte, que fue publicada este lunes en el Boletín Oficial con la firma de Guillermo Dietrich, titular de la cartera.

El objetivo de la medida, que había sido autorizada por el Decreto 63/2017, es prolongar la traza de la Avenida Triunvirato hasta Lacroze y construir viviendas que permitan "relocalizar los hogares precarios ubicados en el sector denominado como Villa Fraga", señala el texto oficial.

Las áreas que serán clausuradas "no se encontraban destinadas al uso operativo ferroviario como tampoco se previó su utilización en el futuro, prestándose por lo tanto, conformidad para su eventual desafectación dominial", indicaba el Ministerio en los considerandos del decreto de autorización.
La norma que se dio a conocer hoy remarca que la clausura "no afecta la conectividad ferroviaria en materia de transporte de pasajeros, atento que se ha previsto preservar un espacio para futuras ampliaciones, tanto para los servicios urbanos como para un eventual restablecimiento de los servicios interurbanos de pasajeros".

La decisión excluye la subestación de energía ubicada en el extremo cercano a la intersección de las calles Fraga y Céspedes, y el electroducto que provee energía eléctrica al Ferrocarril Urquiza. Tampoco alcanza a las vías de servicio ubicadas en el sector de la Playa de Cargas de la Estación Federico Lacroze contiguo a los andenes 9 y 10 de la parada.

Macri pone bajo la lupa los gastos de los ministerios y secretarías

Macri pone bajo la lupa los gastos de los ministerios y secretaríasPor Mariano Obarrio - LA NACION
El Presidente pretende alcanzar el equilibrio fiscal en 2018.
Macri pone bajo la lupa los gastos de los ministerios y secretarías. Foto: Archivo 

Luego de ordenarles a sus ministros que presenten propuestas para recortar gastos, Mauricio Macri comenzó a revisar la ejecución presupuestaria de cada ministerio: la decisión política es que las carteras que ejecuten menos partidas tendrán recortes proporcionales en 2018 y podrían ceder recursos a otros en el ejercicio actual.

"Pueden ceder a otros ministerios para terminar 2017 o recortar partidas para 2018 para ir avanzando en el camino de convergencia al equilibrio fiscal", dijo a LA NACION una alta fuente de la Casa Rosada.

El gasto primario previsto este año es $ 2,3 billones. Macri procura reducirlo en 2018 en términos reales. Los ministerios que demuestren que no pueden ejecutar partidas tendrán menos fondos y ello desatará una puja por los recursos para el año próximo. Tras los primeros cinco meses de 2017, la más baja ejecución presupuestaria (subejecución) la tuvieron los ministerios de Comunicaciones, de Oscar Aguad, y de Hacienda, de Nicolás Dujovne : ambos gastaron sólo 26% del crédito para este año.

El promedio devengado de las 27 jurisdicciones que releva la Oficina Nacional del Presupuesto (ONP) del Ministerio de Hacienda es del 42%, media lógica para el mes de mayo, transcurrido el 41,6% del año. Muy por debajo están también los ministerios de Modernización, de Andres Ibarra, con 27%, y el de Energía y Minería, de Juan José Aranguren , con 28%.

La información surge de un informe de la Asociación del Personal de Organismos de Control (APOC), sobre la base de datos oficiales.

El jefe del Gabinete, Marcos Peña, sólo devengó el 31% de su presupuesto. El ministro de Producción, Francisco Cabrera, el 32%. Los de Justicia, Germán Garavano, y de Agroindustria, Ricardo Buryaile, el 33% cada uno.

Foto: LA NACION 
La Cancillería gastó el 34% y la Secretaría General de la Presidencia de la Nación (Fernando De Andreis), el 35%, al igual que Turismo, que dirige José Gustavo Santos. Todos ellos están debajo del promedio, lo que puede ser interpretado como un déficit de gestión.

Sin embargo, con el correr del año esas carteras podrían recuperar terreno. La medida exacta la conocerá el Presidente sobre final del año y los ministros saben que los ojos de Macri estarán sobre ellos. Tal como informó LA NACION, el jefe del Estado analiza una reestructuración de gastos y una reducción de ministerios y secretarías de Estado para luego de las elecciones.

La estructura quedó muy grande con 21 ministerios, dos organismos con rango de tales, 87 secretarías de Estado, 207 subsecretarías y 687 direcciones, un 25% más que el gobierno de Cristina Kirchner. También apostará a reducir partidas y programas y en este punto será fundamental la ejecución de cada ministerio en 2017 como indicador para elaborar el presupuesto 2018 en base a la capacidad de gestión de cada cartera.

Austeridad

El Presidente pretende dar una señal clara de austeridad el año próximo para bajar el gasto público, reducir el déficit fiscal y consolidar la baja de la inflación.

Otros ministerios se acercan más al promedio de ejecución previsto para esta altura del año. Los de Defensa (Julio Martínez) y Ambiente (Sergio Bergman), gastaron el 36% de sus partidas previstas.

El de Seguridad (Patricia Bullrich), el de Desarrollo Social (Carolina Stanley) y el de Educación (Esteban Bullrich), están en 38%. El de Salud (Jorge Lemus) llegó a un 40%. Los de Interior y Obras Públicas (Rogelio Frigerio), y de Ciencia y Tecnología (Lino Barañao), alcanzaron el 42%. Por su parte, la cartera de Trabajo (Jorge Triaca) tuvo un 47% y el de Transportes (Guillermo Dietrich), un 49%.

El informe relevó otras jurisdicciones como Obligaciones a Cargo del Tesoro (transferencias a provincias), con 30%; Poder Legislativo, con 39%; Poder Judicial, con 43%, Ministerio Público, con 47%, y Servicio de Deuda Pública, con 50%.

Los caídos en Malvinas: hoy empieza la identificación

Por Alan Soria Guadalupe - LA NACION
Un grupo de especialistas de la Cruz Roja trabajará durante dos meses en las islas gracias a un acuerdo entre la Argentina y el Reino Unido
La expectativa por el operativo no alteró la quieta calma en las islas
La expectativa por el operativo no alteró la quieta calma en las islas. Foto: LA NACION / Hernán Zenteno

PUERTO ARGENTINO.- "¿Venís por lo de los cuerpos?" La pregunta de una isleña en Mount Pleasant, la base militar de las Malvinas donde aterriza el único vuelo semanal desde el continente, es la primera de una sucesión de interrogantes que dan cuenta de la expectativa que se vive por estas horas en las islas.

Hoy empieza aquí un proceso que durará dos meses y que pretende dar una conclusión a uno de los tantos capítulos de la guerra: un grupo de especialistas comandados por el Comité Internacional de la Cruz Roja intentará identificar a los cuerpos de los 123 soldados argentinos caídos en combate y que permanecen, desde 1982, enterrados sin sus nombres bajo cruces blancas en el cementerio de Darwin, al que por estas horas cuesta acercarse por un fuerte operativo de seguridad.

Aunque no es un tema que se discuta a viva voz en los pocos comercios o bares de esta ciudad de poco más de 2100 habitantes, todos están al tanto de qué se trata.

Saben que se va a excavar la tierra, que fue un acuerdo al que llegaron los gobiernos argentino y británico y que se buscó el consentimiento de las familias de los fallecidos para avanzar. Detalles más, detalles menos, eso es lo que se conoce hasta ahora, pues es poca la información que brinda el comité desde la conferencia en la que explicó los trabajos semanas atrás.

"Es muy valioso para los familiares", dice Sarah, mientras cuelga la campera en el perchero, se saca las botas con nieve y barro en las suelas y guarda los guantes en la entrada de un restaurante. La mujer, de unos 60 años, suspira como si estuviera harta del frío, más intenso de lo normal en estos días. "Acá siempre hace frío, pero esta vez es inusual. En la semana estará más cálido", cuenta Leeann, que maneja una camioneta de una empresa de traslados.

Esas temperaturas de las que habla tendrán un rol clave en las exhumaciones. Si el suelo está congelado será más difícil extraer las muestras y el proceso, que ya de por sí durará al menos dos meses, podría demorarse.

"Esperamos poder avanzar todo lo posible, pero no sabemos cómo está el suelo", dice a LA NACION uno de los miembros del equipo que viajó a las islas convocado por la Cruz Roja y que se encuentra hospedado en un pequeño complejo cerca del cementerio, que suele estar abierto en la temporada turística que concluyó en abril, pero que se abrió igual en esta fecha exclusivamente para albergar a los especialistas. Y agrega: "Tampoco sabemos con qué nos vamos a encontrar".

Es que la relevancia histórica de los trabajos tiene otro aspecto determinante, que hasta hoy es una incógnita. En caso de que las condiciones climáticas permitan excavar el suelo, no se sabe en qué estado van a estar los cuerpos, que fueron enterrados dentro de tres capas de bolsas mortuorias.

En el mejor de los casos, dicen, el frío conservó los restos de los soldados como para tomar muestras de las huellas dactilares. En el peor escenario, el paso del tiempo hará imposible la identificación. Se espera que se puedan extraer hasta tres cuerpos por día, que luego de ser analizados preliminarmente en un pequeño laboratorio instalado en el terreno volverán a enterrarse, pero no en bolsas, sino en féretros.

Un trabajo complejo

Las muestras serán cotejadas con las de las familias que accedieron a brindar sus propias muestras, que fueron unas 95. Luego, serán enviadas a Córdoba, donde funciona el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). Dos representantes de ese grupo, Mercedes Salado y Luis Fondebrider, trabajarán aquí durante el próximo mes. Después serán reemplazados por otros profesionales.

También viajaron dos forenses desde el Reino Unido. El grupo, que en total está compuesto por 12 especialistas -no sólo forenses-, está a cargo de Laurent Corbaz, que cuenta con más de 30 años de experiencia en trabajos humanitarios.

No todas las familias estuvieron de acuerdo con lo que se hará con los cuerpos y la Comisión de Familiares de Caídos presentó reparos acerca de cómo se llevó adelante el operativo.

Los miembros del equipo con los que habló LA NACION dicen estar al tanto de ello y de la carga emocional que tiene para los parientes la responsabilidad que se les encomendó. "Todas las familias tienen derecho a decir si quieren hacerlo o no", subrayó uno. Otro lo mira, asiente y recuerda cuán emotivo fue el momento en el que vio a unos parientes dejar sus muestras de ADN: "Para los familiares, cuando terminó la guerra el tiempo se congeló".

Datos de una dolorosa misión

Dos meses - Se espera que la misión dure dos meses. Las condiciones climáticas pueden entorpecer y hacer más lento el proceso

Los soldados - 123 es el número de cuerpos sin identificación enterrados en el cementerio de Darwin

El equipo - Tres especialistas prevén exhumar entre dos y tres cuerpos por día. Tras la toma de muestras, volverán a ser enterrados. El equipo de la Cruz Roja lo integran otras 19 personas

El Gobierno negocia para cerrar millonarios juicios viales

Por Diego Cabot - LA NACION
Revisará obras y plazos de las concesiones; el director de Vialidad confirmó que le sacarán a Cristóbal López el contrato de la autopista Ezeiza-Cañuelas
Cabinas de peaje en la autopista a Ezeiza; Cristóbal López tomó la concesión en 2013
Cabinas de peaje en la autopista a Ezeiza; Cristóbal López tomó la concesión en 2013. Foto: Archivo 

La renegociación del contrato de la Autopista del Oeste fue sólo el inicio de un proceso para ordenar todos los accesos a la ciudad de Buenos Aires. Ese camino tiene un sobresalto en lo inmediato: antes de fin de año, el Gobierno le notificará al empresario Cristóbal López que dejará de ser el operador del corredor Ezeiza-Cañuelas, que nace en la General Paz y va hasta el aeropuerto internacional, con un ramal hasta esa ciudad bonaerense.

Con variantes en cada caso, también se acordarán obras y plazos en el acceso norte y en la autopista a La Plata.

En el caso de la autopista que explota la empresa de Cristóbal López, en Vialidad Nacional destacaron que ya prácticamente no hay negociaciones. Según confirmó el propio director nacional, Javier Iguacel, por estos días se revisa jurídicamente la forma de terminar con la relación entre la compañía Autopistas al Sur y el Estado. "Vamos a rescindir el contrato, pero lo vamos a hacer de tal manera que no tengamos una contingencia posterior", dijo a LA NACION.

Los abogados de Vialidad son los encargados de envolver la rescisión de forma que no haya juicios posteriores o que, en caso de que se presenten, el Estado no esté en inferioridad de condiciones a la hora de defenderse.

El Gobierno dice que Aecsa, dueña de Autopistas al Sur, retiene una tasa que se cobra cada vez que un auto, colectivo o camión pasa por una barrera de peaje y que debe depositarse en una cuenta oficial. López y sus ejecutivos contestan que tienen que quedarse con ese importe ya que, de no hacerlo, no podrían pagar los sueldos de los empleados de un corredor que tiene tasas de peaje de 8 pesos mientras sus colegas de los accesos Norte y Oeste, por caso, perciben hasta 45 pesos.

Vialidad tiene su respuesta. Dice que los accesos Oeste y Norte tuvieron una ronda de negociaciones en 2006 con Néstor Kirchner como presidente y entonces acordaron un nuevo esquema, que es el que se aplica actualmente. Autopistas al Sur jamás acordó nada y así compró la concesión López. Es más: esa precaria situación tarifaria fue determinante para que fuera adquirida a un bajo precio en 2013.

Hay quienes dicen que los anteriores dueños de la concesión, Obrascón Huarte Lain (OHL), uno de los mayores grupos de servicios constructores y de servicios de España, estarían dispuestos a relatar las condiciones en las que vendieron. Quienes los escuchen confirmarán algunas palabras que se levantan desde aquel momento: hubo presión, al menos regulatoria, de parte de las autoridades para que los españoles vendieran.

El problema entre Vialidad y López empezó con un fondo llamado Recaudación de Afectación Específica (RAE). Se trata de un valor incluido en el precio del peaje. Quien lo cobra debe depositarlo en una cuenta oficial. Es decir, es un mero agente de cobro. El esquema, al menos teórico, es que ese dinero regrese a la concesión en forma de obras en la traza. La empresa vial del patagónico no lo deposita desde hace meses. Con ese argumento se vendrá la rescisión.

Un caso diferente

Con la autopista que une Buenos Aires con La Plata el asunto es distinto. El gobierno de la provincia de Buenos Aires estatizó la concesión en 2013. Entonces fundó la decisión, según informó el Ministerio de Infraestructura bonaerense, en una serie de incumplimientos de Coviares, la empresa de capitales nacionales que explotaba la concesión. Su lugar lo tomó una empresa provincial creada especialmente para desarrollar esa función.

La empresa Autopistas de Buenos Aires (Aubasa) se creó a través del decreto 409/13. El paquete accionario está compuesto en un 93% por el Estado provincial y el 7% a cargo de los trabajadores representados por su organización sindical.

Sin embargo, en aquel proceso hubo desprolijidades, al punto de que hoy existe un juicio por alrededor de 4500 millones de pesos de los anteriores concesionarios. Lo demás, lo que respecta a las obras de la traza, es otra negociación con el gobierno que maneja María Eugenia Vidal. Sin embargo, el Estado nacional y Vialidad Nacional son los demandados por los anteriores dueños. Una ventaja, a diferencia de los inversores internacionales, es que los juicios se tramitan en la Argentina.

Con Autopistas del Sol (la concesionaria del acceso norte, más conocido como Panamericana) la situación es distinta. Los principales accionistas son los españoles de Abertis, que ya negociaron con Vialidad el contrato de Autopistas del Oeste. Los inversores internacionales tienen un juicio en el Ciadi, el tribunal arbitral del Banco Mundial. "Es más complejo, ya que el nivel de inversiones que se requiere es mucho más grande. Pero vamos encaminados", dijo Iguacel.

Finalmente están las rutas concesionadas, los llamados "corredores viales". Allí hay reuniones continuas para avanzar en un esquema novedoso. Se probará en estas rutas un nuevo esquema que se aprobó el año pasado. Se trata de los sistemas de participación público-privada. Las PPP son una herramienta clave para desarrollar la infraestructura. Acá se probará si realmente podrán canalizar dineros de privados en infraestructura pública.

Del editor: Cómo sigue - Las negociaciones por los accesos podrían derivar en un ajuste de los peajes más en línea con la evolución de la inflación.

Odebrecht admitió haber pagado sobornos por las obras del Sarmiento

Marcelo Odebrecht hizo la revelación bajo la figura de "delación premiada"Por Hugo Alconada Mon - LA NACION
El principal ejecutivo de la empresa dijo a la justicia brasileña que hubo pagos millonarios para acceder al proyecto en la Argentina; habrían abonado US$ 20 millones.

Marcelo Odebrecht hizo la revelación bajo la figura de "delación premiada". Foto: Archivo 

Marcelo Odebrecht, delator premiado y máximo responsable de las coimas que durante años pagó su empresa en Brasil y en muchos otros países, confesó que el proyecto para el soterramiento del tren Sarmiento, en la Argentina, incluyó el desembolso de sobornos millonarios, según surge de documentos todavía secretos de la investigación Lava Jato a los que accedió LA NACION. Habrían abonado unos US$ 20 millones.

El empresario confirmó, así, la operatoria delictual que desplegó su compañía en el país, al reconocer que las siglas "DGI" que aparecen en múltiples documentos internos de la constructora no aludían a la Dirección General Impositiva local, sino que eran un eufemismo para esconder los pagos de coimas.

Anotar "DGI" en un memo, explicó Odebrecht a sus interrogadores, implicaba haber asumido "compromisos políticos", afrontar "favores", "contribuciones", "pagos a agentes públicos", "donaciones" u otros rubros ilícitos que terminaban incorporándose a los costos finales de cada contrato. Así lo revelan documentos que analizó LA NACION como parte de un proyecto periodístico colaborativo regional liderado por el equipo peruano IDL Reporteros.

Marcelo Odebrecht no aportó los nombres de quienes recibieron esos pagos ilegales en la Argentina, y tampoco los montos. Aclaró a sus interrogadores que él "delegaba mucho" cuando se trataba de operaciones en el exterior.

Pero otros ejecutivos de la compañía que también se acogieron al régimen de delación premiada aportaron algunas piezas faltantes del rompecabezas hasta redondear una cifra cercana a US$ 20 millones para quedarse con el contrato para soterrar el Sarmiento, en pleno kirchnerismo.

Condenado a 19 años y 4 meses de prisión por el juez federal brasileño Sergio Moro, Marcelo Odebrecht también aludió a la imposición de ciertos "socios locales" por parte del gobierno kirchnerista como condición ineludible para pujar con chances por contratos millonarios.

En algunos países, explicó el ahora delator premiado, las empresas estaban "obligadas" a recurrir a socios locales. Y señaló a la Argentina, en particular, como un territorio donde esa práctica y la contratación de lobbistas eran indispensables. Esas firmas y esos operadores locales, dijo, tenían los "accesos políticos" y los contactos para canalizar cualquier pedido.

Para disputar el proyecto del soterramiento del Sarmiento, la constructora brasileña conformó un consorcio con otras tres empresas -la argentina Iecsa, la italiana Ghella y la española Comsa-, mientras que para otros proyectos en la Argentina recurrió a la constructora Esuco, de Carlos Wagner, y a la firma BTU, de Carlos Mundin.

No sólo eso. La constructora también debió contratar los supuestos "servicios de consultoría" de Jorge "Corcho" Rodríguez. Y el propio Odebrecht, según reconstruyó LA NACION, identificó a la Argentina, junto a Colombia y a República Dominicana, entre los países donde más peso tenían y tienen esos operadores.

En el caso del soterramiento del Sarmiento, Odebrecht lidió con tres equipos de interlocutores distintos al operar con Iecsa. Porque la constructora funcionó hasta 2007 bajo el control de Franco Macri y desde entonces quedó en manos de su sobrino, Ángelo Calcaterra, primo del por entonces flamante jefe de gobierno porteño Mauricio Macri. Pero a partir de marzo de este año, ya con Macri como presidente y con el capítulo local del Lava Jato en ciernes, Iecsa cambió otra vez de dueño. Marcelo Mindlin tomó el control de la compañía con una condición: armar un "fondo de contingencia" -una reserva sobre el precio total de venta- que le permita afrontar las eventuales multas y penalidades que las autoridades argentinas puedan imponerle si se verificaran esas coimas.

¿Cómo habría sido la operatoria delictual por el soterramiento del Sarmiento? Al confesar sus crímenes, Odebrecht explicó que las siglas "DGI" no eran más que un rubro de la "Caixa 2", la frase con la que en su país se conoce al dinero negro que mueven las empresas brasileñas por fuera de sus balances para pagar coimas y financiar campañas electorales.

Otro protagonista del lado más oscuro de la compañía, Hilberto Mascarenhas, incluso detalló a los investigadores los porcentajes que, por lo general, se consideraban habituales para ese rubro "DGI". Entre el 5% y el 8%, dijo, "dependiendo de las negociaciones", aunque ese valor se redujo, en ciertas operaciones específicas, al 3 por ciento.

En el caso del soterramiento del Sarmiento, en tanto, las coimas se pagaron en la Argentina, pero también en Brasil, para destrabar el financiamiento. Le pagaron 15 millones de reales (US$ 5 millones al tipo de cambio actual) al entonces ministro de Desenvolvimiento, Industria y Comercio Exterior brasileño, Fernando Pimentel, según confesó el ex ejecutivo de Odebrecht Joao Carlos Mariz Nogueira -hoy uno de los delatores premiados- y publicó ayer el diario Perfil.

Ése y otros desembolsos ilegales, explicaron los investigadores brasileños en uno de los documentos del Lava Jato que ya fueron desclasificados, se autorizaban con un único objetivo: obtener "ventajas indebidas" para el emporio Odebrecht. Y fueron "ejecutados por el sector de operaciones estructuradas", y reafirmaron que esos "pagos se realizaban e incluso eran autorizados por Marcelo Bahía Odebrecht".

Pero el heredero del imperio que lleva su apellido no fue el único que vinculó las siglas "DGI" con el pago de coimas. Al referirse a la Argentina, al menos dos ejecutivos de la división de operaciones estructuradas -el lado oscuro de la compañía-, Mauricio Couri Ribeiro y Fernando Migliaccio, también aludieron a pagos ilegales, de manera específica por el soterramiento del Sarmiento, en mails que recuperaron los investigadores.
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La tuneladora encargada del soterramiento del Ferrocarril Sarmiento, en Haedo. Foto: Archivo
En uno de esos correos, por ejemplo, Couri Ribeiro aludió a su reunión de junio de 2010 con un ingeniero, Héctor Javier Sánchez Caballero, uno de los máximos directivos de Iecsa, para debatir el supuesto pago de sobornos, según reveló el diario brasileño Estadao el 17 de febrero.

Lugarteniente de Calcaterra en Iecsa durante años, Sánchez Caballero actuó como director titular de la constructora hasta el 16 de marzo, cuando Mindlin ingresó a la empresa, la rebautizó Sacde (Sociedad Argentina de Construcción y Desarrollo Estratégico SA) y reemplazó todo el directorio por gente de su confianza.

Ahora, cuando le resta un mes para cumplir 62 años, Sánchez Caballero continúa cerca de Calcaterra y presta servicios de asesoramiento al equipo de Mindlin mientras completan la transición. Y les dice a sus íntimos que él nada sabe de pagos de sobornos y que, al menos delante de él, "nunca se habló de eso", según reconstruyó LA NACION.

Odebrecht dio otra versión durante su confesión. Planteó que a menudo eran los socios locales los que se encargaban de canalizar las "contribuciones políticas", ya fueran lícitas o ilícitas.

Apoyado en fuentes de la Policía Federal brasileña, Estadao aportó más datos sobre la operatoria de Odebrecht en la Argentina. Reveló la aparición de "al menos cinco mensajes relacionados con el pago de sobornos para las obras del tren Sarmiento", siempre enmarcados bajo el eufemismo de las siglas "DGI".

Así, en otro de los correos electrónicos de Couri Ribeiro -titulado "Reunión Sarmiento"- que recuperó la Policía Federal brasileña, el ejecutivo consignó la existencia de tres sumas distintas que asoció a "DGI". ¿Suma total? US$ 20 millones.

La Policía Federal brasileña también detectó un intercambio de correos entre Couri Ribeiro y Migliaccio, en los que aludían a distintas transferencias bancarias que se canalizaron en el exterior por el proyecto del Sarmiento. Algunas de ellas con el operador Manuel Vázquez, testaferro del entonces secretario de Transporte Ricardo Jaime.

domingo, 18 de junio de 2017

Crecen los robos a mano armada en la Provincia: hay 160 casos por día

Crecen los robos a mano armada en la Provincia: hay 160 casos por díaPor Natalia Iocco - Clarin.com - Lo indican los números oficiales de los primeros 5 meses de 2017. En 2016 había 142 en promedio y 131 en 2015. La cantidad de crímenes se mantiene: 3 cada 24 horas.

Protesta contra la inseguridad en Villa Ballester, esta semana.

Agustín Bustamante tenía tres años. Lo asesinaron de un tiro en la espalda hace diez días en un robo en Lomas de Zamora. A su papá, Martín, le sacaron 200 pesos y un celular. El crimen fue uno de los más resonantes de los últimos tiempos, conmovió a todos y volvió a poner la inseguridad en el tope de la indignación de los bonaerenses. Las nuevas estadísticas oficiales de la provincia de Buenos Aires, a las que Clarín accedió en forma exclusiva, confirman que se trata de una bronca sostenida por la realidad: los robos a mano armada no paran de crecer, al punto que hay unos 160 casos por día. Esto es, un 10% más que el año pasado (cuando había 142 por día) y un 17% más que en 2015 (eran 131 diarios).

Las cifras también marcan que, aunque en los últimos tres años los números tienden a la baja, en la provincia de Buenos Aires asesinan -en promedio- a tres personas por día, según los datos oficiales de los homicidios dolosos (con intención).

Las estadísticas surgen de los expedientes iniciados en los 18 departamentos judiciales de la Provincia por homicidios dolosos y robo agravado por el uso de arma de fuego. Clarín tuvo acceso a estas cifras de 2016 y los primeros 5 meses de 2017, todas desconocidas hasta ahora. Fueron recabadas por la Procuración General de la Suprema Corte.

Así, en 2016 hubo 1.129 homicidios (3,09 por día ) y 52.065 robos agravados por el uso de arma de fuego (142 por día). Esa tendencia se sostuvo en los primeros cinco meses de 2017: entre enero y mayo se registraron 24.088 robos a mano armada (160 al día), un 10% más que el año pasado y un 17% más que en 2015 (cuando hubo 47.897). Los hurtos también tienen un aumento sostenido.

Esa tendencia se palpa en los barrios del Conurbano, donde todos tienen un caso cercano para contar. Es que, en estos cinco meses, seis personas por hora fueron víctimas de un asalto en el que les apuntaron con un arma para hacerlo. A ellas hay que sumarles las 7.500 que denunciaron intentos de robo (50 por día), en los cuales también hubo amenazas con armas pero algo externo a la voluntad del ladrón frustró el asalto.

Las estimaciones oficiales hablan de alrededor de tres millones de armas en circulación sin registrar. Mientras la cantidad de asaltos no paró de crecer en los últimos años, el Programa Nacional de Entrega Voluntaria de Armas estuvo suspendido durante 2016 y se reactivó recién el 22 de mayo pasado.
Crecen los robos a mano armada en la Provincia: hay 160 casos por día
El asesinato de Carlos Sánchez, chofer de la linea 514 en Claypole. FOTO MARIO SAYES

En las entraderas, según aseguran las víctimas, los asaltantes no sólo piden dinero, joyas y electrodomésticos: también exigen “los fierros”, aunque no tengan ningún indicio de que los haya.

“¡Basta!”, “¡Justicia” y “Más seguridad” son los tres gritos más repetidos en las marchas que proliferan en el Conurbano cuando los casos se concentran en algún barrio.

La Matanza, los departamentos judiciales de Lomas de Zamora (que incluye Almirante Brown, Avellaneda, Esteban Echeverría, Ezeiza, Lanús y Lomas de Zamora), Morón (Morón, Hurlingham, Ituzaingó y Merlo) y San Martín (José C. Paz, Malvinas Argentinas, San Martín, San Miguel y Tres de Febrero) concentraron el 61% de los robos a mano armada el año pasado y el 71% en lo que va de 2017. En esos partidos vive el 44% de la población provincial, según datos de censo 2010.

En esos mismos departamentos del sur y el oeste del GBA se cometieron el 54% de los homicidios de toda la Provincia en 2016 y el 60% de los de 2017. Los números totales dan 1.129 homicidios en territorio bonaerense en 2016 y 440 en lo que va de 2017.

A esto hay que sumarle que sólo en los primeros 13 días de junio -mes que no entra en las estadísticas- hubo nueve asesinatos en medio de robos y secuestros en Almirante Brown, Lomas de Zamora, La Matanza, Quilmes y San Martín, según un relevamiento realizado por Clarín. En el partido de Lomas de Zamora ocurrieron más de la mitad de esos casos en siete días.
Crecen los robos a mano armada en la Provincia: hay 160 casos por día
Víctima. Jorge Enrique Migueli, 35 años, camionero asesinado en Llavallol

En ese departamento judicial, el que más se calentó en el último tiempo, en 2017 ya suman 113 los homicidios (0,75 por día), lo que marca un aumento respecto a 2016 (cuando hubo 231, un 0,64 por día). Con los robos a mano armada, la progresión en Lomas de Zamora indica lo mismo: un fuerte aumento. En 2015 hubo 10.540 (28 por día); en 2016 hubo 11.269 (30 por día); y en 2017, 5.279 (35 por día).

La tendencia se aceleró durante junio, mes que no registran los datos disponibles. El domingo 4 de junio, Mirta Graciela Alegre (40) cayó de un colectivo durante un asalto al colectivo en el que iba por Villa Fiorito y murió; el miércoles 7 de junio mataron a Agustín Bustamante (3) en Villa Centenario: el sábado siguiente, a la madrugada, el camionero Jorge Migueli fue asesinado de un balazo en Llavallol; ese mismo día, a las 19.40, Josefa Carrozzieri (67) y Braulio Herrera (71) murieron en Villa Galicia al chocar el auto en el que los llevaban secuestrados. Por esos hechos hubo dos marchas multitudinarias y por redes sociales convocan a otra para el martes a las 15 frente a la Municipalidad, de la que participarían familiares y amigos de esas víctimas.

La furia vecinal derivó en el anuncio de Martín Insaurralde, el intendente de Lomas, junto al ministro de Seguridad de la Provincia, Cristian Ritondo, de un refuerzo de vigilancia. Según informaron en la cartera, ya suman 2.700 policías entre la Local y la Bonaerense en ese distrito del sur del GBA. Con esa incorporación, alcanzarían los 438 agentes por cada 100 mil habitantes, algo que parece no ayudar a prevenir los hechos.

En mayo, los ojos se habían posado en La Matanza, donde hubo cuatro asesinatos en sólo 13 días, todos en medio de hechos de inseguridad. El distrito ocupa el 19° lugar en el “ranking” de policías del Conurbano, con 299 agentes por cada 100 mil habitantes. Eso a pesar de ser uno de los lugares más calientes de la Provincia y el que más población tiene.

Zona de obras de la Rosada al Congreso: un plan busca devolverle el brillo

Por Nora Sánchez - Clarin.com - Trabajan en la Pirámide de Mayo y en la iluminación, fachadas y veredas de Avenida de Mayo. A la Plaza del Congreso le sumarán espacios verdes. La circulación, más complicada.
Zona de obras de la Rosada al Congreso: un plan busca devolverle el brillo
Iluminación. Colocaron luminarias y proyectores LED en las fachadas de 21 edificios de Avenida de Mayo. Éste está al 600. / Martín Bonetto

Desde hace 123 años, la Avenida de Mayo es la columna vertebral de la actividad cívica de la Argentina. La construyeron a lo largo de seis años, para unir la Plaza de Mayo con la Lorea. Todavía no existía el edificio del Congreso Nacional, que fue inaugurado en 1906. Pero este eje ya había nacido con el destino de conectar al Poder Ejecutivo con el Legislativo. Fue recorrido por todos los presidentes el día de su asunción y, también, fue el escenario de grandes procesiones fúnebres, como la de Evita. También se convirtió en un centro vital para los porteños, con la primera línea de subte de la Ciudad, sus edificios hispánicos y sus hoteles, bares, restaurantes y teatros. Pero con los años languideció. Ahora, por primera vez desde los años 90, hay en marcha un plan para recuperarla.

El proyecto consiste en revalorizar todo el eje cívico con una inversión total de casi $ 129 millones. Esto incluye $ 30 millones para poner en valor la avenida, $ 4 millones para restaurar la Pirámide de Mayo, $ 2,3 millones para la iluminación de frentes de edificios, $ 33,5 millones para arreglar fachadas de 32 edificios patrimoniales y $ 59 millones para recuperar la Plaza del Congreso. Parte de los trabajos están avanzados, mientras que otros, incluyendo la reparación de fachadas, tomarán hasta un año más de tiempo. Estos trabajos se suman a los que se están realizando en distintas zonas de la Ciudad, como la de Tribunales, y que generan problemas de circulación en veredas y calzadas por los andamios y los cortes de calle.
Zona de obras de la Rosada al Congreso: un plan busca devolverle el brillo
Sin baches. Arreglan las veredas en Avenida de Mayo. / Juano Tesone

Estos trabajos se suman a los que se están realizando en distintas zonas de la Ciudad, como la de Tribunales, y que generan problemas de circulación en veredas y calzadas por los andamios y los cortes de calle.

"Con esta obra buscamos recuperar el espíritu y el esplendor de la zona a través de una serie de mejoras tanto en la Pirámide de Mayo como en la Plaza del Congreso y en la Avenida de Mayo -explica Eduardo Macchiavelli, el ministro de Ambiente y Espacio Público del Gobierno de la Ciudad-. A través de estas intervenciones vamos a devolverle la impronta y la jerarquía a este tradicional paseo porteño".

Los trabajos en la Pirámide de Mayo empezaron a fines de diciembre y tomarán un mes más. La parte superior, con la figura de la Libertad, ya está terminada y a la vista, pero el basamento sigue rodeado por un cerco de obra. "En este momento estamos restaurando las cuatro placas de los escudos, una de las cuales ya está lista. A la pirámide le tuvimos que sacar capas y capas de intervenciones mal hechas. Ahora la mampostería está al aire. Para la terminación final vamos a usar pintura a la cal, que es la que se usaba en la época", cuenta el arquitecto Marcelo Magadán, a cargo de la obra.

Zona de obras de la Rosada al Congreso: un plan busca devolverle el brillo
Pirámide de Mayo. Ya terminaron de poner en valor la parte de arriba. / Juano Tesone​

A través de estas intervenciones vamos a devolverle la impronta y la jerarquía a este tradicional paseo porteño, explica Eduardo Macchiavelli, el ministro de Ambiente y Espacio Público del Gobierno de la Ciudad.

En una carpa junto a la Pirámide están las cuatro esculturas de mármol que representan a La Navegación, La Industria, La Geografía y La Astronomía, que hasta 1912 la rodeaban. Pero en ese año movieron al monumento y las esculturas terminaron en la Plazoleta San Francisco, en Defensa y Alsina. Ahora volverán a formar parte del conjunto de la Pirámide.

En la Avenida de Mayo también se ven cambios. Ya colocaron luminarias y proyectores LED en las fachadas de 21 edificios, como los de los hoteles Astoria y España, que están al 900 de la Avenida. Siete de estas intervenciones fueron financiadas por empresas privadas, como bancos y cadenas gastronómicas. En total, los arreglos alcanzarán a un total de 32 edificios con distintos grados de deterioro, una tarea que podría estar finalizada en un año. También harán mejoras en las veredas, el mobiliario urbano y el arbolado.

"Estamos recuperando fachadas y adecuando las plantas bajas de edificios que a través de los años se fueron desfigurando", detalla Juan Vacas, director general de Regeneración Urbana de la Ciudad. Y pone como ejemplo al edificio de Avenida de Mayo y Bernardo de Irigoyen, construido en 1903 como casa de rentas y que sucesivamente fue el hotel Eslava, después el D'Arc y, tras estar abandonado por dos décadas, en 1991 fue sede de casa FOA. Desde 2011 allí está el hotel La Fresque. Pero su planta baja, donde funcionó la confitería Alhambra, se encuentra tapiada. "La estamos recuperando y vamos a dejar al descubierto sus aberturas originales", anticipa Vacas.

Estamos recuperando fachadas y adecuando las plantas bajas de edificios que a través de los años se fueron desfigurando, detalla Juan Vacas, director general de Regeneración Urbana de la Ciudad. 
Zona de obras de la Rosada al Congreso: un plan busca devolverle el brillo
Avenida de Mayo al 900. Andamios y redes, para poner en valor los edificios. / Juano Tesone

También están recuperando fachadas de edificios Art Nouveau. Como la del Hotel Chile (Avenida de Mayo 1297), proyectado por Louis Dubois, con sus líneas curvas, trabajos de herrería y su cúpula. O la del ex hotel París (al 1161 de la avenida), una obra del arquitecto Gerónimo Agostino de 1904 que se destaca por su cúpula y por las cariátides que coronan la ochava bajo el balcón del primer piso.

El eje cívico desemboca en la Plaza del Congreso, que está en pleno proceso de renovación. En rigor se trata de tres plazas que ocupan una superficie de 4.720 m2, porque el conjunto incluye a la Mariano Moreno y a la Lorea. "Se trata de un espacio de uso ceremonial y de mucho valor simbólico, que también tiene un uso barrial", dice Vacas. Y cuenta que ya se completó el recambio de veredas del entorno y la iluminación. Además, nivelaron la calle Virrey Cevallos que atraviesa las plazas para integrarlas mejor. La idea es reforzar el uso gastronómico y comercial de los alrededores y mejorar la accesibilidad mediante adecuaciones de varias esquinas sobre Rivadavia e Hipólito Yrigoyen.
Zona de obras de la Rosada al Congreso: un plan busca devolverle el brillo
Congreso. La Plaza vallada, para la restauración y la ampliación de espacios verdes. / Juano Tesone

Los trabajos contemplan ganar 4.100 m2 de superficie verde absorbente en el entorno de la fuente monumental y de los canteros laterales de la Plaza Congreso, más otros 620 m2 en los canteros centrales de las plazas Mariano Moreno y Lorea. También recuperar la traza original de senderos, plantar árboles, y restaurar los palcos de orquesta laterales, que hasta hace poco sirvieron de vivienda para personas sin techo.

Además, pondrán en valor la fuente de la plaza Lorea y unificarán los modelos de rejas que protegen a los monumentos, que también serán restaurados. Otras mejoras se harán en el patio de juegos y en el mobiliario urbano, que será renovado por completo. La obra estaría terminada en agosto. Así, aunque proseguirán los arreglos en algunas fachadas, para fin de este año el eje cívico volverá a ser una atracción de la Ciudad, como lo fue tras su inauguración, en 1894.

Lázaro Báez tiene 1.355 bienes valuados en $2.734 millones

Por Federico Mayol - fmayol@infobae.com
La información surge de un informe que el Tribunal de Tasaciones de la Nación le envió al juez Sebastián Casanello y al que accedió Infobae
El empresario está detenido en el penal de Ezeiza (NA)
El empresario está detenido en el penal de Ezeiza (NA)

Estancias, departamentos, baldíos, talleres, constructoras, casonas, galpones, cocheras, concesionaria de autos, terrenos, oficinas, un club deportivo, locales comerciales, un hotel, vehículos y maquinaria vial. Lázaro Báez tiene 1.355 bienes valuados en $2.734 millones, unos 186 millones de dólares. Es la tasación a la que llegaron los técnicos del Tribunal de Tasaciones de la Nación al que accedió Infobae, y que esta semana fue enviado por el organismo al juez federal Sebastián Casanello, que tramita la causa 3017/2013, conocida como la "ruta del dinero K", por la que el zar de la obra pública K está preso desde abril del año pasado. El jueves, Guillermo Marijuan pidió la indagatoria de Cristina Kirchner, según el fiscal por ser coautora de maniobras de lavado de dinero junto al empresario.
Según el informe, el patrimonio de Báez asciende a 418 bienes inmuebles distribuidos entre Santa Cruz, Chubut, la ciudad y la provincia de Buenos Aires. Y 937 vehículos -varios de alta gama- y maquinaria vial de Austral Construcciones S.A, la empresa insignia del supuesto testaferro del ex presidente Néstor Kirchner que acaparó gran parte de la obra pública de Santa Cruz. Los autos y las máquinas viales suman $160.761.000. Desde la Justicia no descartan que, en futuros allanamientos, puedan aparecer más bienes.

La fortuna del empresario está compuesta en gran medida por las propiedades que posee en El Calafate, la villa preferida de la ex Presidenta. Báez tiene allí 107 inmuebles, valuados en $688.197.700, que incluyen desde una gomería, baldíos y departamentos, hasta las ocho estancias que entre todas suman decenas de miles de hectáreas por un total de $184.371.000. Se trata de Cruz Aike -$46.000.000-, La Julia -$27.650.000-, Río Bote -$16.000.000-, El Campamento -$19.117.000-, La Santafesina -$20.128.000-, Ana -$15.793.000-, El Rincón -$21.804.000- y La Porteña -$17.879.000-. Hay otra chacra que no pudo ser tasada porque "no se ubicó".

Una de las estancias del empresario, valuada en 15 millones de pesosUna de las estancias del empresario, valuada en 15 millones de pesos

En El Calafate se encuentra la propiedad mejor valuada del patrimonio del ex empleado bancario: el Hotel Bahía Calafate, ubicado en el centro de la villa homónima -en la calle De los Frenos 3055-, que Báez construyó pero que nunca inauguró, y cuyo valor es de $156.400.000, según el Tribunal de Tasaciones. La información sobre el emprendimiento hotelero fue aportada a la Justicia por la diputada Margarita Stolbizer y su abogada Silvina Martínez. De acuerdo a la denuncia, presentada a mediados del año pasado, el complejo, de cinco plantas, le pertenecería a los Kirchner. Y formaría parte de un grupo de hoteles de los ex presidentes bajo la administración de Báez.

En Río Gallegos, el zar de la obra pública K tiene 80 inmuebles que ascienden a $903.576.000. Hay de todo. Desde la chacra de la calle Nicolás Giglio al 1400, valuada en $99.941.000 -cuenta con varios recintos para el cultivo de plantas-, hasta un estudio contable en la calle Libertad, un galpón de autos sobre Guer Aike al 100, tasado en $9.027.000, la empresa Austral Construcciones y la sede del club Boca de Río Gallegos, sobre la avenida Kirchner al 200, de $49.255.000. También figura la estancia Alquinta, de varios lotes, valuada en $101.944.000.

La fortuna del empresario patagónico también se expandió hacia la ciudad y la provincia de Buenos Aires. En la Ciudad, Báez adquirió decenas de departamentos y más de 150 cocheras en los barrios de Belgrano y Palermo, que ascienden a más de $150 millones. En la Provincia, en tanto, hizo lo propio: departamentos y lotes en barrios privilegiados como Ayres del Pilar, en la localidad homónima del Conurbano bonaerense, que en total suman más de $32 millones.
En las localidades de 28 de Noviembre, El Chaltén, Río Turbio, Caleta Olivia, Las Heras, Puerto Santa Cruz, Guer Aike, Río Chico y Deseado, en Santa Cruz, el empresario también ramificó sus bienes. Invirtió en complejos de cabañas, en estancias, en parajes, depósitos y galpones por cientos de millones de pesos. En Río Chico, por ejemplo, uno de los departamentos santacruceños, la Justicia encontró cinco estancias -Laguna Asador, Manantial Alto, La Irenita, Los Gurises y Río Olnie- que fueron valuadas por el Tribunal de Tasaciones en $240.839.000. También se expandió en Chubut.

Uno de los casos más emblemáticos del crecimiento patrimonial del supuesto testaferro de Kirchner es el de Pinamar, la ciudad balnearia de la costa bonaerense que el ex empleado bancario jamás pisó. La tasación del organismo oficial, según la documentación que está en manos de la Justicia, se hizo en base a cinco casonas en la zona norte de la ciudad costera, la más selecta, cuyo valor es de $21.698.000. Están ubicadas sobre las calles Troya, Del Libertador, Helades, Goleta Hércules y Poseidón, todas cerca del club de golf. En realidad, dichas propiedades, que habían sido escrituradas por Austral Construcciones, habían sido adquiridas por uno de los ex contadores de la empresa. En la piscina de una de las casas había, en el fondo y pintado, un escudo de Boca Juniors.

Los caídos en Malvinas: la increíble historia del hombre que enterró los cuerpos

Cardozo en las islas, después de finalizada la guerraPor Agustina López - LA NACION
Geoffrey Cardozo, militar inglés, se encargó de la ingrata tarea por pedido de Londres; participará de la identificación de cadáveres.

Cardozo en las islas, después de finalizada la guerra.
El capitán Geoffrey Cardozo pisó por primera vez las Malvinas una vez finalizada la guerra. Como soldado inglés, con 32 años, había estado en otras zonas de combate, pero no peleó esta vez. Sin embargo, su nombre y su libreta pasaron a la historia: fue el hombre encargado de organizar el cementerio de Darwin y de registrar en su anotador todos los datos posibles de los 123 soldados argentinos que hoy yacen allí sólo bajo una cruz blanca. Gracias a esa tarea -que recayó en él casi de casualidad- mañana la Cruz Roja comienza en las islas el proceso de exhumación y localización de los soldados argentinos "sólo conocidos por Dios".

Durante los meses que duró el enfrentamiento, Cardozo trabajó en el Ministerio de Defensa en Londres, ocupándose de tareas logísticas, hasta que recibió un llamado: alguien debía ir a Malvinas y ocuparse de las secuelas del combate y, sobre todo, de mantener la disciplina de esos jóvenes soldados.

"La batalla recién había terminado y las islas estaban en muy mal estado. Hay algo en la psicología de esos que ganan y pierden que es muy fuerte y los une: ellos son los sobrevivientes. No es fácil de sobrellevar", cuenta Cardozo, ahora retirado, a LA NACION, en una conversación telefónica desde Londres, justo antes de partir a Malvinas en donde la Cruz Roja lo contactó como consejero.


Había cartas que debían ser mandadas y muchos prisioneros argentinos todavía custodiados por los ingleses, a punto de ser devueltos a sus familias. Y cuerpos. Cientos de cuerpos enterrados en zonas de combate, rodeados de minas. Cuerpos abandonados en aviones que habían caído solitarios entre los recovecos del archipiélago. Cuerpos destrozados por las bombas.

Las tumbas estaban diseminadas y eran halladas, poco a poco, por un grupo de ingenieros especializados que realizaban tareas de localización de minas. Cardozo se ocupó de ir anotando todos los puntos en los que se encontraban cadáveres. "Decía una pequeña plegaria y anotaba en la libreta", recuerda. Pasaron los meses y cuando Margaret Thatcher ofreció a Leopoldo Galtieri repatriar los cuerpos, la negativa del gobierno argentino planteó una nueva tarea: construir un cementerio y trasladarlos todos a un solo lugar. De eso se ocuparía Cardozo.

"No podía pedirles esa tarea a los hombres que acababan de terminar un combate. Eran cuerpos que llevaban enterrados varios meses", explica Cardozo. Los ingleses decidieron entonces ocupar civiles en la tarea. Por eso, voló de regreso a Londres y se entrevistó con tres casas funerarias. Los requisitos que solicitó eran pocos: necesitaba una docena de personas, mayores de 30 años -porque la tarea demandaba cierta madurez emocional-, pero de menos de 40 y en buenas condiciones físicas. Sólo una de las empresas le dijo que sí y voló con ellos a las islas. Era enero de 1983.

El grupo de expertos en cementerios, pero vírgenes en el combate, recibió uniformes y algunas lecciones de cómo subir y bajar de un helicóptero. El oficial experimentado, las propias sobre cómo organizar un cementerio. Uno a uno, apoyándose en las notas que había tomado Cardozo, los cuerpos fueron recuperados desde el aire entre la caprichosa geografía de Malvinas y llevados al lugar en donde soldados ya preparaban el sitio de entierro.

Antes de ponerlos en bolsas mortuorias y finalmente en tierra, Cardozo debía identificarlos. "Todos los soldados profesionales deben tener una chapa con su nombre colgada del cuello justamente para identificarlos, pero estos eran chicos. A muchos no les habían dado chapa", cuenta Cardozo. De todos modos, antes de enterrar los cuerpos anónimos, registró todo lo que vio en su libreta y, al lado de cada número que representaba una tumba, volcó esos datos: fotografías que llevaban, particularidades del uniforme, detalles. "No enterré ningún cuerpo sin antes haberle dado vuelta todos los bolsillos y cerciorarme de que no podía ser identificado. Miramos a cada uno de esos soldados, pero esto era posguerra: no existían registros dentales o las muestras de AND", jura. Después, hubo una ceremonia religiosa y "eso fue todo".
Resultado de imagen para Los caídos en Malvinas
Cardozo dio por finalizada su tarea, pero se reencontró con ella muchos años después, ya retirado. A través de búsquedas en Internet se enteró de que gran parte de las familias de los caídos no sabían qué había ocurrido con sus hijos en Darwin: "Habíamos hecho todo para respetarlos y las familias no lo sabían, no sabían qué había pasado".

Cardozo tomó una decisión: viajaría a la Argentina para hablar con ellos, pero antes les haría llegar una copia de su informe. Por ello, en octubre de 2008, cuando un grupo de ex combatientes de Malvinas visitó a sus contrapartes inglesas para aprender de técnicas de sanación después del combate, Cardozo vio una oportunidad. El último día del encuentro, antes de bajar del taxi que compartían, el oficial inglés le entregó a Julio Aro, José Luis Capurro y José María Raschia, tres argentinos que habían estado en la guerra, un sobre de papel madera. Adentro estaba una de las tres copias de todo lo que había ido recogiendo en su libreta. Ya de regreso en el país, traductora mediante, comprendieron lo que habían recibido y fundaron "No Me Olvides", con la idea de acercar esos datos a los familiares de los caídos y, tal vez, lograr identificarlos.

Pasaron ocho años y Cardozo decidió por fin viajar a la Argentina. Así, el año pasado, sin prensa ni apoyo del gobierno de por medio, se reunió con las familias de los chicos que él había enterrado. "Quería estar con ellos y decirles qué había sido yo. Darles un cierre". Ante la pregunta de LA NACION si también fue un cierre para él, contesta: "Yo tuve mi cierre cuando dejé las Malvinas, no pensé que volvería a pensar en esto. Mi rabia surgió cuando me enteré de que había muchas familias que sufrían porque no sabían lo que había pasado. Fue un alivio cuando pude contarles". Cuando se le pregunta por el proceso de exhumación que comienza mañana, responde: "No sé si tendremos éxito, pero al menos podré mirar a los soldados a la cara y decirles: hicimos lo mejor que pudimos".

La Matanza: una Argentina marginal y feroz en el corazón del conurbano

Por Carlos M. Reymundo Roberts - LA NACION
Histórico feudo del peronismo, es el partido más grande del GBA y el más poblado de la provincia; sus 2,2 millones de habitantes viven bajo el flagelo de la pobreza, el narcotráfico y la inseguridad; tiene 114 villas y asentamientos; más de la mitad de las calles son de tierra
Ciudad Evita. En una campaña en la vía pública, la intendenta Magario, ultrakirchnerista, se atribuye la construcción del Metrobus que corre a lo largo de la ruta 3; pero es una obra del gobierno nacional. Foto: Fabián Marelli
Ciudad Evita. En una campaña en la vía pública, la intendenta Magario, ultrakirchnerista, se atribuye la construcción del Metrobus que corre a lo largo de la ruta 3; pero es una obra del gobierno nacional. Foto: Fabián Marelli

Para encontrar una versión dramática de la Argentina, una de sus expresiones más postergadas e injustas, no hay que viajar cientos de kilómetros hasta parajes miserables de alguna provincia del Norte. Está a 20 minutos de la Plaza de Mayo.

Con sus 114 villas y asentamientos, y una pobreza estructural que excede por mucho a esos barrios, el megapartido de La Matanza es una expresión cabal del conurbano profundo, el vasto territorio donde el país se queda sin niveles mínimamente razonables de salud, educación, trabajo, asfalto, agua, cloacas, electricidad, gas y transporte.

LA NACION recorrió durante tres semanas la geografía feroz de este distrito, mítico feudo del PJ. Por momentos resulta un descenso a los infiernos. Apenas hay que asomarse y aparecen hospitales colapsados, zonas colonizadas por el narco, inseguridad, corrupción, mafias, un sinnúmero de calles de tierra, cientos de basurales a cielo abierto y caseríos de mala muerte que periódicamente son arrasados por las inundaciones.

La Matanza tiene unos 2,2 millones de habitantes, con cerca de un 40% de pobres. Es el partido más poblado de la provincia, un conglomerado sólo superado por la Capital y las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe. Con sus 330 kilómetros cuadrados, es el más extenso del GBA, al punto de que reúne los tres cordones urbanos: primero, segundo y tercero, desde la General Paz hasta Cañuelas. Los proyectos para dividirlo han fracasado.

Caótico, multifacético, intimidante, La Matanza es, como otros distritos del conurbano (Quilmes, José C. Paz, Lanús, Lomas de Zamora), un monumento a la marginalidad y la decadencia. Y a la disparidad. De los grises monoblocks sobre la General Paz a los barrios residenciales de Ramos Mejía; del flamante Metrobus de 16 kilómetros sobre la ruta 3, a las tinieblas de la villa Puerta de Hierro, en Isidro Casanova; del febril enclave boliviano de Villa Celina, pegado a la Autopista Ricchieri, a descampados convertidos en basurales sobre la ruta 1001, en González Catán; de la calma provinciana de Aldo Bonzi al estallido comercial del centro de Gregorio de Laferrère, todo tiene lugar en este partido, gobernado sin interrupciones por el peronismo desde 1983. Su intendenta es la ultrakirchnerista Verónica Magario (FPV), activa opositora a Macri y heredera de una de las mayores maquinarias de clientelismo político del país. Magario no concedió una entrevista a LA NACION para esta nota.

Un puntero peronista, que pidió no ser identificado, acompaña a LA NACION en una de las recorridas. Tiene 51 años y es matancero de nacimiento. Vivió el proceso de desindustrialización que comenzó en los años 80, la explosión demográfica (entre 2001 y 2010 la población creció 41%) y el virtual retiro del Estado. Habla de la potencialidad del partido y de su extraordinaria fuerza laboral, pero no niega lo que salta a la vista: los niveles de vida bajísimos, problemas de infraestructura, falta de servicios. No sólo no los niega: los muestra. En Virrey del Pino, una mañana lluviosa de mediados de mayo conduce su auto hasta la puerta de una escuela, a la que muchos chicos llegan caminando desde un asentamiento que queda a 20 cuadras. Tienen jeans gastados y los zapatos recubiertos por una bolsa de plástico. "Fíjense -dice el puntero-. Ahora las madres los cambian, les ponen el delantal y les sacan las bolsas. Para llegar tienen que atravesar barriales. Y si llueve mucho, no vienen. Las maestras ya saben que es normal que de 20 alumnos a veces aparezcan sólo 3 o 4." Agrega un dato: varios de esos chicos almuerzan en un comedor popular.

También es común ver a gente grande con bolsas en los zapatos. Al llegar al asfalto, se las quitan. "Estoy acostumbrado. Vivo en un barrio de González Catán donde no pasan colectivos", dice Yamil Oroqui, de 34 años, mozo en un bar de Once.
Foto: LA NACION 
Nadie sabe a ciencia cierta qué porcentaje de calles pavimentadas tiene el partido. Autoridades municipales hablan de 70% y una fuente de la comuna dice, en estricta reserva, que no pasa de 60%. Activistas sociales creen que son menos. "Lo que sí sabemos ¬apunta Miguel Saredi, ex concejal y ex candidato por Cambiemos a la intendencia de La Matanza- es que muchas calles figuran como asfaltadas y no lo están. En el Concejo Deliberante se aprueban las obras, se les destinan fondos, después nos dicen que se hicieron y, en realidad, o se hizo muy poco o directamente nada."

Héctor Mantello, concejal por el Frente Renovador, afirma que su padre vive en una calle de tierra. "Pero le cobran una tasa como si estuviese pavimentada, porque así figura oficialmente. De todos modos, es cierto que asfaltaron mucho con plata que les mandaban los Kirchner. Lo que pasa es que resulta insignificante respecto de lo que falta hacer."

Sin cifras

En La Matanza, "calle de tierra" es, o puede ser, un eufemismo. Buena parte de ellas son senderos intransitables, barro vivo, huellas tapadas por pastizales. En el barrio Vernazza, de Virrey del Pino, la camioneta en la que iba el cronista de LA NACION tardó 10 minutos para hacer 100 metros. Allí, las periódicas crecidas del río La Matanza no sólo dejan sumergidas las calles. También los asentamientos, que igual siguen creciendo.

Un reflejo de la marginalidad de un distrito de más de 2 millones de habitantes, pegado a la Capital, es la orfandad de cifras, en todos los niveles de gobierno. Durante semanas, la búsqueda de datos sobre servicios básicos, como agua corriente, cloacas y tendido eléctrico, resultó infructuosa. Las cifras que informa la intendencia (65% de la población con cloacas y 95% con agua corriente) no son confiables para nadie; llegan a calificarlas de "humor negro".

Y a nivel provincial y nacional señalan que se encontraron con un vacío estadístico alarmante. "Voy a ver si hay algo, pero lo dudo", se disculpa un alto funcionario en La Plata.

Fernando Ascensio, concejal por el Partido Renovador y vicepresidente del Concejo Deliberante, dice que los números que da la municipalidad están muy lejos de ser reales. Pone un ejemplo. "Hablan de 500 cámaras de seguridad y no son más de 200, de las cuales andan sólo 70." Y advierte que otras situaciones se silencian: por el polémico relleno sanitario del Ceamse de González Catán, "la mitad de la localidad tiene el aire, el suelo y el agua contaminados".
Villa Celina. Pasacalles que desde hace unos meses se ven por todo el partido y que son atribuidos a una campaña del PJ local, alineado al kirchnerismo y uno de los más duros críticos del gobierno nacional
Villa Celina. Pasacalles que desde hace unos meses se ven por todo el partido y que son atribuidos a una campaña del PJ local, alineado al kirchnerismo y uno de los más duros críticos del gobierno 
nacional. 

Foto: Fabián Marelli

La precisión sobre la cantidad de villas y asentamientos del partido, 114, no corresponde a ninguna administración. Es fruto de un relevamiento que concluyó el año pasado de la ONG Techo, dedicada al combate de la pobreza. Según Techo, que hace sus trabajos sobre el terreno a partir de entrevistas con los jefes barriales, en las 114 villas viven unas 220.800 personas, lo que da un promedio aproximado de 1 de cada 10 habitantes del distrito, el mismo porcentaje que a nivel país. "La realidad de las villas y asentamientos de La Matanza es muy compleja, pero no difiere mucho de la de otros partidos del conurbano o de otras provincias", dice Florencia Yaccarino, investigadora de la ONG.

Diversos especialistas coinciden en que lo distintivo de La Matanza es que amplios sectores no tienen un estándar de vida muy superior al de los barrios marginales. "El promedio general es muy bajo. En muchas zonas, lo que es villa y lo que no es villa no es tan distinto", dice el sacerdote jesuita Rodrigo Zarazaga, coautor del reciente libro Conurbano infinito, exhaustiva radiografía social y política de una región que viene estudiando desde hace años.

El libro recoge un viejo reclamo de los matanceros: la coparticipación que recibe el partido -y el GBA en general- de fondos provinciales es bajísima. En 2015 fue de 1361 pesos por habitante, contra, por ejemplo, 6000 de Roque Pérez, 10.070 de Maipú y 14.863 de Pila (el que más recibe).

Shopping del paco

Recorrer el distrito es ir de salto en salto, de perplejidad en perplejidad. En un radio pequeño, la confluencia de las localidades de La Tablada, Ciudad Evita, San Justo (cabecera del partido) e Isidro Casanova es territorio de asentamientos, villas y monoblocks que llevan el sello de violentos e impenetrables. Las villas San Petersburgo y, casi pegada, Puerta de Hierro, son, de hecho, comarcas del narco. En ellas se cocina, vende y consume paco, una suerte de shopping de la droga. 

Al atardecer, la estación Justo Villegas del ferrocarril Belgrano Sur, a metros de Puerta de Hierro, brinda un espectáculo propio de un relato de ficción. Decenas y hasta cientos de jóvenes que, en un rush que dura segundos, bajan del tren, corren a la villa, compran droga y vuelven corriendo para subirse al tren que va en sentido contrario, hacia la Capital. Es un mecanismo de relojería que no puede fallar. Si pierden el tren de vuelta, que ya está en la estación, son asaltados por los mismos que les vendieron la droga.

La San Petersburgo no sólo vive del paco. Su otra especialidad es el robo de autos. Los "cortan" en sólo dos horas y venden sus partes a desarmaderos de la zona. Otro rush. Una cadena de montaje, pero al revés.

A unas cuadras, la villa Palito, sobre Camino de Cintura, cobró celebridad al haber sido urbanizada con fondos del gobierno nacional durante la presidencia de Cristina Kirchner. Luce colorida y con servicios de cloaca, agua y luz. Igual, sigue siendo zona de riesgo. Fuentes policiales dicen que es habitual que chicos o jóvenes roben a los autos que paran en los semáforos con los vidrios bajos, para perderse enseguida en los intrincados pasillos de la villa.

Los más prósperos comerciantes del centro de Laferrère, con locales sobre la Avenida Luro que se alquilan a precios a veces superiores a los de la avenida Corrientes, disfrutan de las multitudes que caminan por sus veredas, pero sufren otro tipo de inseguridad. Barrabravas del popular club de fútbol Deportivo Laferrère, de la Primera C, los visitan para cobrarles una suerte de "impuesto". "Nosotros pagamos unos 5000 pesos por mes -cuenta el encargado de una tienda de deportes-. Es el precio para no tener problemas."

A 200 metros, en terrenos ferroviarios pegados a la estación, cinco jóvenes queman manojos de cables a la luz del día. En general es material robado de luminarias públicas. Derriten la cobertura para quedarse con el cobre de su interior, que después venden por kilo.
Laferrère. En la Avenida Luro al 6000, el mayor centro comercial de La Matanza, por el que todos los días pasan miles de personas; la contracara es que barrabravas cobran un "impuesto" a los locales
Laferrère. En la Avenida Luro al 6000, el mayor centro comercial de La Matanza, por el que todos los días pasan miles de personas; la contracara es que barrabravas cobran un "impuesto" a los locales. 
Silvana Nicastro, vecina de San Justo, reconoce que vive con miedo día y noche. "Desde la mañana empezamos a escuchar que hubo secuestros, robos, entraderas, en Ramos, Laferrère, Lomas del Mirador. Es un clásico. Historias que muchas veces se hacen cercanas y dolorosas porque involucran a padres del colegio, vecinos, la señora que trabaja en casa, sus hijos...".

Los altos índices de inseguridad de La Matanza, similares a los de otros partidos del GBA, la hacen aparecer periódicamente en las crónicas policiales. Pero a veces el delito gana batallas impensadas. En la calle Da Vinci, de Laferrère, hay una vieja casona de paredes blancas despintadas. Sobrepasados por la delincuencia -cuenta el concejal Mantello-, sus moradores cerraron y se fueron. Lo singular es que era una comisaría.

En La Matanza, la ecuación entre legalidad e informalidad invierte los términos habituales. La informalidad es ley. En un altísimo porcentaje, el comercio, tanto a la calle como puertas adentro, trabaja en "negro". Hay barrios enteros en los que el pago con tarjeta y la entrega de facturas casi no existen. Proliferan los talleres clandestinos y miles de locales de todos los rubros funcionan gracias a habilitaciones precarias, poderosa fuente de recaudación de funcionarios corruptos. "Estamos desregulados", sonríe una señora que atiende un maxiquiosco en Tapiales.
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Como en Cuba, Haití o África

En Laferrere y otras localidades, la ausencia de colectivos incluso en zonas densamente pobladas ha dado origen, hace años, a un sistema de transporte ilegal que acaso es único en el país: los "0,50" (cuando empezaron cobraban 50 centavos), autos viejos, destartalados, sin patente ni luces, en su mayoría Ford Falcon, que hacen las veces de remises para viajes compartidos. Cobran entre 5 y 10 pesos y tienen distintos recorridos. El desfile por avenidas de decenas de esos autos que parecen caerse a pedazos, abarrotados de pasajeros, remite a Cuba, Haití o algún país africano. "Son una mafia, pero suplen lo que no hace el Estado. Llevan a la gente a su casa", dice Saredi, el ex candidato a intendente por Cambiemos.

Por fuera del régimen legal circulan, además, combis e incluso colectivos. En barrios alejados, la falta de transporte, formal o informal, deja a miles de personas en un virtual aislamiento y las obliga a traslados a pie que duran horas. No son excepcionales los casos de mujeres que tienen que dar a luz en sus casas.

La precariedad y a veces el absurdo también corroen el sistema de salud pública de La Matanza. El enorme hospital Presidente Néstor Kirchner, en Laferrère, inaugurado en 2011 por Cristina Kirchner, nunca abrió sus puertas. En el René Favaloro, de Rafael Castillo, algo más chico pero también nuevo, por ahora sólo funcionan consultorios externos. El Simplemente Evita, en González Catán, se ve muy bien desde afuera; adentro saltan a la vista el deterioro, la desorganización y falta de recursos. "Ponemos la mejor voluntad, pero tenemos limitaciones de todo tipo", dice una enfermera que pide reserva de su nombre. El Teresa Germani, municipal, que reabrió en 2015 en un edificio nuevo, le arrancó una ironía a un dirigente de la oposición: "Lo inauguró Cristina y sin embargo parece que está funcionando". El Balestrini, en Ciudad Evita, otro de los que fueron inaugurados varias veces durante el gobierno de Daniel Scioli, pasará a la historia por la mutación cromática de su fachada en cada nuevo corte de cintas: ya fue azul, celeste, naranja, gris claro y gris oscuro.
La matanza: Pobreza y refugio K. #AndateLaMatanza
"No hay médico clínico a la fecha", avisa un papel pegado en la entrada del hospital materno infantil Dr. Equiza, en González Catán, dependiente de la municipalidad. Es un edificio viejo, sombrío y en pésimo estado. A la sala de guardia, diminuta y atestada de madres con sus hijos, le faltan asientos y le sobra agua por la rotura de un caño. Un par de chicos juegan a patinar en el charco.

Zarazaga dice que hay mucha resignación en los habitantes del partido, forjada en décadas de adversidad. Jorge Ceballos, abogado, docente y dirigente de Libres del Sur, que vive en Ramos Mejía, habla del heroísmo silencioso de su gente.

Un episodio de hace meses en Rafael Castillo compendia ese heroísmo y esa resignación. Durante el asalto a un colectivo, una pareja fue atacada a tiros. La mujer estaba embarazada, y su marido se interpuso para defenderla. Él quedó postrado en una silla de ruedas, pero la salvó a ella y a su hijo. La historia, que en otros lugares hubiese estallado en los medios, nunca trascendió. Se perdió en la oscura inmensidad de La Matanza, a 20 minutos de la Plaza de Mayo.

Entre penurias y esperanzas
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María Eugenia Vidal - Gobernadora de Buenos Aires
"La Matanza es maltrato de los que la gobernaron, es abandono y pobreza, pero ahora también es el Metrobus, es radicación de empresas, es esperanza"

Héctor "Toty" Flores - Cooperativa La Juanita
"Vivimos en medio de una inseguridad total, sobre todo por la expansión del narco, y eso no se arregla sólo poniendo más policías. Se arregla con asfalto, con iluminación..."

Jorge Ceballos - Dirigente de Libres del sur
"La publicidad de la comuna dice que «La Matanza avanza». En realidad va para atrás. Lo único que les preocupa es ganar sus internas. La gestión y la gente no les importa nada"

Odebrecht: revelan que De Vido acordó coimas por US$ 25 millones

Por Hugo Alconada Mon - LA NACION
Así se desprende de documentación de la investigación y de la declaración de un testigo delator; fue para destrabar el acceso de la constructora a una obra gasífera

El entorno directo del ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido acordó una coima por US$ 25 millones y otras "prácticas no convencionales" a cambio de destrabar el acceso de la constructora brasileña Odebrecht a un proyecto multimillonario para la extensión de las redes troncales de gas en el país.

La información surge de documentos todavía secretos de la investigación internacional Lava Jato que obtuvo, verificó y analizó LA NACION durante las últimas semanas.

Esos documentos muestran que la negociación delictiva de Odebrecht con el gobierno kirchnerista abarcó dos etapas, con dos intermediarios distintos. La primera etapa quedó en manos del dueño de Esuco, Carlos Wagner, quien presidió la Cámara Argentina de la Construcción durante ocho años del kirchnerismo, entre 2004 y 2012. La segunda fase fue con el lobbista Jorge "Corcho" Rodríguez como interlocutor determinante.

Rodríguez pasó a trabajar para Odebrecht como "consultor" durante años. Pero tanto él como Wagner actuaron frente a los representantes de la compañía brasileña como emisarios de De Vido, y así lo entendieron quienes negociaron con ambos y acordaron pagar esos US$ 25 millones entre 2007 y 2014, de acuerdo con el material al que accedió LA NACION como parte de un proyecto periodístico regional liderado por el equipo peruano IDL Reporteros desde hace un año y medio.


LA NACION consultó a Rodríguez y a Wagner, quienes rechazaron las sospechas. "Eso que dicen es falso", contestó el ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción. "No facilité ninguna reunión", abundó.


Foto: LA NACION

Rodríguez también rechazó los dichos de los delatores brasileños. "Es mentira", replicó. "¡Me usan para tapar otros temas y otras personas, que sí estuvieron metidas!", añadió, sin dar nombres.

De Vido siempre negó cualquier rol en el entramado de coimas de Odebrecht. "Nunca podrán imputarme nada con seriedad", contestó el ex ministro en mayo, cuando algunos datos salieron a la luz desde Brasil. Consultado ayer por LA NACION, De Vido se negó a responder preguntas o hacer comentarios, mientras que su vocero subrayó que el contrato bajo sospecha era para la extensión de las redes troncales como un acuerdo "entre privados".

Pero las desmentidas de De Vido, Wagner y Rodríguez se contradicen con las confesiones en Brasil. Allí, uno de los máximos jerarcas de Odebrecht, Mario Faria da Silva, se acogió al régimen de "delación premiada" para reducir su tiempo en prisión a cambio de contar lo que sabía sobre las coimas que pagó la compañía durante décadas en varios países. Y habló sobre los millones que se pagaron en la Argentina.

El ministro del Superior Tribunal Federal (STF) de Justicia brasileño, Edson Fachin, reveló los primeros y acotados datos sobre ese negociado en un documento de apenas tres carillas que remitió a la Procuración General de su país, según reveló LA NACION en abril pasado.

Según reconstruyó desde entonces LA NACION, Faria reconoció que él mismo se reunió dos veces con De Vido, quien sin embargo evitó hablar sobre esas coimas.

Por el contrario, el brasileño detalló que la operatoria ilícita quedó en manos de dos colaboradores: su subsecretario de Coordinación, Roberto Baratta, quien pasó de levantar quinielas a asumir como subsecretario de Coordinación del Ministerio de Planificación, y Roberto Mandolesi, quien como director de Nación Fideicomisos destrabó el pago de $ 1000 millones para la empresa BTU durante los últimos días en el poder del kirchnerismo, en diciembre de 2015.

Señalada desde hace años por una supuesta excelente relación con De Vido, BTU también quedó bajo la lupa en Brasil. Según detalló el ahora "delator premiado" Faria, esa empresa fue recomendada por el Ministerio de Planificación Federal.

El rol de Wagner

Condenado a 19 años y 4 meses de prisión en Brasil por corrupción, lavado de dinero y asociación ilícita, Faria se convirtió en delator para reducir su paso por la cárcel. Y detalló quiénes son los otros ejecutivos de Odebrecht que saben sobre las coimas que se pagaron al entorno directo del entonces ministro y actual diputado nacional por el Frente para la Victoria (FPV). Contó que uno de ellos es Flavio Bento e Faría, por entonces máximo jefe de la constructora en Argentina.

Flavio Bento e Faría -sin parentesco alguno con Marcio Faria- fue quien se reunió con Wagner, de Esuco, quien expuso el pedido de coimas requerido por los funcionarios públicos. Indicó que si querían hacer negocios en la Argentina, debían pasar por él, lo que Wagner negó de manera tajante a LA NACION.

Sin embargo, Marcio Faria también señaló a ex otro ejecutivo de Odebrecht como negociador directo de esa coima por US$ 25 millones. Dijo que fue Hilberto Mascarenhas da Silva, quien también se acogió al régimen de la delación premiada y contó ante los investigadores brasileños que la empresa pagó cerca de US$ 3340 millones en coimas y aportes ilegales a campañas electorales, tanto en Brasil como en otros países entre 2006 y 2016. Es decir, lo que en Brasil se conoce bajo el paraguas de "Caixa 2".

¿Cómo fue la negociación delictiva? Cuando Odebrecht comenzó a moverse para pujar, desde 2007, en la licitación para la ampliación de ampliación de la capacidad del transporte de gas a lo largo de 15 provincias argentinas, su entonces superintendente en el país, Flavio Bento e Faria, fue contactado por Wagner, quien se presentó como dueño de Esuco y presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, pero expresó su verdadera misión en cuanto vislumbró la oportunidad.

Con su nombre en la "ruta del dinero K" -causa en la que está imputado- y en al menos seis sociedades offshore que aparecen en los Panamá Papers, Wagner fue directo. Según Marcio Faroa, "le pidió coimas" a Bento e Faria, pero se cuidó de darles los nombres de los destinatarios, aunque a los brasileños les quedó muy claro quiénes eran.

Fue entonces cuando uno de los máximos responsables de la División de Operaciones Estructuradas de Odebrecht -es decir, el área dedicada a las coimas de la empresa-, Hilberto Mascarenhas ajustó los detalles para el pago de los sobornos. A partir de allí, el camino de los negocios con el Estado argentino se simplificó para Odebrecht, que sólo recibió elogios de De Vido durante dos reuniones que mantuvo con el ahora delator premiado.

Sin embargo, el entendimiento ilícito se quebró en octubre de 2010. Con la muerte del ex presidente Néstor Kirchner, el pacto se quebró, y Odebrecht comenzó a padecer todo tipo de problemas con la ejecución y cobro del multimillonario contrato. Esos problemas sólo se solucionaron con la aparición del lobbista Jorge "Corcho" Rodríguez, quien reabrió las negociaciones ilícitas con los representantes de la constructora brasileña, acordó nuevos pagos y hasta les aportó los números de las cuentas bancarias offshore donde debían depositar el dinero de las coimas.

Según reconstruyó LA NACION, sin embargo, Rodríguez actuó más como emisario de De Vido ante Odebrecht que como lobbista de la constructora brasileña ante el entonces ministro. Y los datos públicos que se conocen sobre él como operador alientan la confusión.

Así, como lobbista de Odebrecht, el "Corcho" recibió a varios empresarios en las oficinas de la compañía, pero al mismo tiempo viajó a China con De Vido. Lo hizo como operador de la empresa brasileña, aunque también produjo los discos del hijo guitarrista del entonces ministro.

Consultado por LA NACION, Rodríguez rechazó las sospechas. "Nunca estuve en ninguna negociación de ninguna obra", replicó. "Hasta por una cuestión de tiempos no es posible. Ese contrato se negoció años antes. Mi relación con la empresa comenzó en 2011", retrucó.

Ahora, el acuerdo para desembolsar coimas por US$ 25 millones se encuentra bajo investigación en Brasil y en la Argentina. Allá llegó a las manos de Edson Fachin, ministro del Superior Tribunal Federal de Justicia -el equivalente a la Corte Suprema.

A cargo de supervisar todas las investigaciones derivadas del Lava Jato, Fachin analizó los dichos de Faria y emitió la "Petición N° 6712". Dirigida a la Procuración General, le pidió que evalúe si el Poder Judicial brasileño tiene jurisdicción para juzgar este tipo de actos de corrupción cometidos por empresas de su país en el extranjero.

En la Argentina, en tanto, la operatoria que ahora sale a la luz ya había quedado bajo la lupa del fiscal federal Carlos Stornelli, quien desarrolló una investigación preliminar. Encontró indicios y radicó una denuncia, que quedó en manos del fiscal federal Federico Delgado y el juez Ariel Lijo, para luego recaer en el juzgado de Daniel Rafecas.
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